Las etapas modernas están equipadas con pantallas de LEDs, que son vitales para la configuración. Su diseño cuenta con una brillantez y precisión de color excepcionales, lo que les permite ser vistas fácilmente en un entorno escénico bien iluminado. El rango de contenido que estas pantallas pueden proyectar es extenso, incluyendo imágenes complejas que pueden representarse como fondos realistas durante las obras de teatro o como efectos visuales dinámicos en conciertos. Debido a su diseño modular, se pueden personalizar en tamaño y forma para adaptarse a diferentes dimensiones del escenario. Con la ayuda de la automatización de audio e iluminación, las pantallas de LEDs del escenario se pueden controlar para que el público reciba una atmósfera completa.